Wendy Plant: más de 30 años de servicio dedicado

Wendy Plant trabaja para Oikocredit desde hace 32 años y eso la convierte en la empleada más antigua de Oikocredit. Wendy comenzó como empleada administrativa después de mudarse a los Países Bajos desde su Australia natal y en el transcurso de los años su función ha cambiado muchas veces. Wendy trabaja en la oficina internacional de Oikocredit en Amersfoort y actualmente es asistente personal del director ejecutivo y oficial de viajes: organiza todas las asambleas generales anuales, de personal y del Consejo Supervisor, dispone intercambios del personal y capacitaciones que se realizan en la oficina de Amersfoort para la cooperativa. En reconocimiento de su dedicación a Oikocredit, le pedimos que compartiera con nosotros algunas de sus experiencias y aportes del tiempo trabajado en Oikocredit.

¿Por qué te sumaste a Oikocredit?

Era el comienzo de la década de 1980 y estaba viajando por Europa. Aquí, en los Países Bajos, conocí a mi esposo, que es holandés, y me enamoré de él. Mi familia también tiene sus raíces aquí, de modo que decidí quedarme. Después de aprender holandés, continué desarrollando mis habilidades de secretariado. Fue entonces que vi un anuncio en el diario para un cargo de apoyo administrativo en Oikocredit, que estaba en inglés, ¡lo cual llamó mi atención! En esa etapa de mi carrera, la idea de trabajar para una organización de desarrollo internacional también me atrajo mucho.

¿Cómo era trabajar para Oikocredit cuando comenzaste?

Cuando comencé, Oikocredit recién empezaba y contaba con sólo cuatro personas en la oficina de Amersfoort y alrededor de cinco en las oficinas regionales. Ahora, treinta años después, tenemos aproximadamente 400 personas empleadas en total entre nuestra oficina internacional, las regiones y las organizaciones de apoyo, además de 600 voluntarios y voluntarias. En ese entonces, cuando comencé, nuestras funciones eran mucho más amplias ya que hacíamos todo nosotros mismos; desde reportar cada acción individualmente en un archivo hasta redactar el informe anual o hacer folletos nuevos. He trabajado con siete directores ejecutivos.

¿Cómo es ahora?

La organización creció y cambió muchísimo. Ahora tiene diferentes departamentos para comunicaciones, finanzas, TI, energías renovables, desempeño social, etc. Piense en la tecnología y las redes sociales. El profesionalismo de la organización es uno de los principales cambios que he visto. Oikocredit ya no es un niño pequeño: ha crecido y florecido hasta convertirse en un adulto respetado y maduro. A pesar de todos estos cambios, nunca perdimos de vista la razón de nuestra existencia. Mantener nuestra misión conlleva desafíos pero es una parte fundamental de nuestra organización que es importante para nosotros.

¿Qué es lo que más disfrutas de trabajar en Oikocredit?

¡La gente! Ya sean mis colegas y pares en Amersfoort o en el resto del mundo. Siempre fueron las personas quienes hicieron mi trabajo atractivo. Tengo la suerte de ocupar un puesto que me permite conocer a personas de culturas muy diversas. Tengo la oportunidad de viajar una o dos veces al año a un país donde Oikocredit trabaja activamente, lo cual es una gran oportunidad para mí de ver el trabajo de Oikocredit en el terreno. De este modo, aprendo sobre diferentes culturas y eso tiene mucho valor para mí desde el punto de vista tanto profesional como personal.

¿Qué significa para ti trabajar para Oikocredit?

Para mí significa mucho. En los cargos que ocupo, puedo usar mis diferentes habilidades en toda la organización, puedo ser parte del contexto más general y tener una opinión de algún modo. Lo que Oikocredit hace en el mundo es de suma importancia y tiene un gran impacto en muchas personas y sus comunidades, lo cual significa mucho para mí.